Aunque la interfaz no ha cambiado, los usuarios del software de ESRI tendremos que actualizarnos porque muchas de las innovaciones que han sido incluidas, simplemente se perfilan como requisitos mínimos para poder hablar en la actualidad de un buen programa para crear, manipular, administrar y
publicar un SIG.
Pongamos como ejemplo a la empresa Google, que transformó el programa
KeyHole en un software que podía utilizarse sin la necesidad de una suscripción anual,
Google Earth, poniendo al alcance del público miles de imágenes de la tierra a escalas muy grandes, permitiéndonos conocer los nombres de las calles de una ciudad, sitios de interés en general, montar imágenes, dibujar puntos, líneas y polígonos georeferenciados y luego transformarlos en 3D con
Sketchup. Sólo unos meses atrás,
GoogleMaps había sido lanzado, que era similar a Google Earth, pero versión Web y cuyas capas (tres en principio) podían visualizarse una por una o sobrepuestas. Pues bien, las innovaciones que Google compró-desarrolló-publicó-vendió-y más- cada día se utilizan más por desarrolladores SIG, prueba de ello es que el API en javascript del nuevo ArcGIS Server, podrá utilizarse con GoogleMaps y
VirtualEarth (este último, es una tecnología de Microsoft, que en la incesante acumulación de capital,intentó competir incursionando en el mercado de los mapas y parece que ha tenido éxito...).
Bueno, pues esta empresa se ha encargado de que diversas compañías en el mercado de los SIG, tengan que desarrollar tecnológía que pueda competir con la sencillez que desde sus inicios caracterizó a Google y por supuesto, y tal vez de las cosas más importantes, que deben competir con una tecnología que se pone al alcance de todos de forma gratuita. Por supuesto que representa un problema serio para ESRI o MapInfo, por ejemplo; pero además, que la tecnología se convierta en
OpenSource y se elaboren programas como
Grass o
MapServer, y que cada vez mayor cantidad de recursos SIG estén disponibles de forma gratuita, de verdad que hace correr a marchas forzadas la ardilla de agencias gubernamentales e instituciones de investigación.^
Así que, para bien o para mal ESRI se pone al día, pero su software es tan caro que difícilmente podremos actualizarnos. Afortunadamente, el código abierto (open source) y la disponibilidad de recursos gratuitos en internet, nos permiten ponernos al día tecnológicamente hablando y ya cuando sea posible la migración a una versión más reciente del software de ESRI no nos habremos perdido de mucho, sólo habría que adaptarnos a la nueva interface y encontrar lo que buscamos que de hecho ya sabríamos que existe. Después de todo, el mundo globalizado, el pleonasmo más espectacular de los últimos años, nos permite comunicarnos y entendernos de formas muy diversas en cuestión de segundos, por lo que realmente valdría la pena invertir tiempo bajando e instalando el ServicePack 6, que invertir dinero en otra licencia de ESRI, para obtener un programa nuevo, seguramente con errores que se corregirán en futuros
services packs y que además, al no ser una completa y nueva versión, realmente las funciones adicionales salen sobrando si consideramos que las podemos obtener en otros lugares de forma gratuita.
Ahora bien, ¿por qué seguir usando ESRI en vez del software libre? Bueno, es una pregunta fácil que resulta muy difícil de responder, pero de forma muy simplona podríamos decir lo siguiente: desgraciadamente, muchas de las veces el software libre es muy difícil de utilizar por el usuario novel. Los programas más simples
, cuyos
diseñadores y desarrolladores se preocupan más por ofrecer un software fácil de usar con una interfaz limpia y sencilla, normalmente son aquellos que los usuarios corrientes han preferido históricamente (también influye mucho la mercadotecnia, pero esa es otra historia), en cambio, programas más complejos y potentes, con interfaces igualmente complejas, que en verdad hacen aflorar el ingenio humano y que permiten elaborar tareas más complicadas, la mayoría de las veces han sido preferidos por usuarios experimentados, que son muy pocos.
° Así que, resumiendo, naveguen por la web, que en cuestión de SIGs (y de muchas otras cosas) el panorama está muy interesante.
^(en este sentido, la
NASA ha dado pasos enormes,
e.g. los datos de la
SRTM; en México el mismo INEGI, que en los últimos dos años ha ofrecido gran parte de su
biblioteca y mapoteca digital a través de
su portal de internet).
°
E.g. Linux, que después de tantos años de estar desarrollándose, parece que finalmente ha logrado incursionar en el ámbito de los mortales con distribuciones como
Ubuntu.